En las afueras de París, la organización creada en 1961 instaló su Asamblea General, en la que sus delegados pasaron revista a las actividades del último año, entre ellas el envío de un contenedor con ayuda para sectores como la salud, uno de los más golpeados por el cerco económico, comercial y financiero aplicado por Washington desde hace más de seis décadas.

Asimismo, discutieron sobre futuras acciones de respaldo a Cuba, que serán ratificadas mañana en el cierre del foro, del que saldrá una declaración final.

El embajador de la nación antillana en suelo galo, Otto Vaillant, participó como invitado en la asamblea general, en la que ofreció a los presentes una actualización sobre el panorama cubano, en particular las consecuencias del bloqueo.

Vaillant agradeció la solidaridad con su país y las décadas de labor de France Cuba.

Además del bloqueo, el diplomático denunció la inclusión de la isla en la unilateral lista de países que Estados Unidos considera patrocinadores del terrorismo y la cruzada de desestabilización, política ante la cual insistió en la importancia del apoyo internacional.

En el encuentro encabezado por el presidente de la asociación, Fabrice Leclerc, fue ratificado el Comité Director, y mañana se elegirá al nuevo Buró de la organización.

Leclerc es uno de los franceses condecorados a finales del año pasado con la Medalla de la Amistad, entregada por Decreto Presidencial de Cuba

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