La citada cartera ministerial mantuvo este domingo en verde la alerta declarada la víspera en los departamentos (regiones) de Cortés, Colón e Islas de la Bahía, pero subió un escalón la situación de atención para Atlántida, donde las lluvias provocan inundaciones y daños en comunidades.
Esa alarma fue extendida por otras 24 horas (hasta mañana lunes), como consecuencia también del alto oleaje que castiga a esa zona del litoral caribeño de la nación centroamericana.
Según el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos, sobre el territorio hondureño persiste la influencia de una cuña de alta presión, que ocasiona olas de cuatro a cinco pies de altura en el mar Caribe, lo cual generó fuerte marejadas en comunidades costeras.
Estas condiciones climáticas generarán temperaturas frescas, viento acelerado del noreste, lluvias débiles a moderadas con actividad eléctrica en las regiones del norte, noroccidente y nororiente de Honduras, pronosticó la fuente.
Para el resto del territorio nacional, los chubascos serán débiles, a excepción de la zona sur y suroccidente, agregó.
Las autoridades pidieron a los comités de emergencia municipales estar atentos ante cualquier amenaza que pueda perjudicar a la población, en especial a los sectores más vulnerables.
También llamaron a los pobladores de áreas cercanas a ríos o en zonas propensas a deslizamientos, derrumbes, hundimientos e inundaciones, a que tomen precauciones y eviten cruzar crecidas.
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